Los dramas estadounidenses tienen su propio ritmo de producción y transmisión. Las estaciones de televisión siempre anunciarán la reserva de un lote de dramas nuevos y, al mismo tiempo, "cortarán" un lote de dramas que ya se han transmitido. Por lo tanto, no todos los dramas americanos pueden tener un "final de temporada" perfecto. El pequeño final en el que el guionista expone hábilmente los presagios y revela el suspenso puede convertirse en un "mal final" que nunca se resolverá. Aunque esta medida evita el continuo desperdicio de recursos por parte de los "dramas basura", también decepciona a algunos fanáticos del programa.
"Killer": Un equipo convencional produce una historia no convencional
Después de tres temporadas, Fox decidió no renovar "Killer" para una cuarta temporada. Aunque la primera temporada del programa logró un gran éxito cuando se estrenó, con una media de 8 millones de espectadores, tras un cambio de dirección creativa, los ratings recientes cayeron a sólo 3 millones.
De hecho, aunque el estreno se considera un "éxito constante", la crisis de "Killer Disciple" ya está condenada. La razón es simple. Esta serie de televisión no es el tipo de trabajo popular que puede hacer que actores desconocidos se vuelvan famosos de la noche a la mañana. El elenco principal de la serie de televisión está formado por Kevin Bacon y James Bowen. El primero es una superestrella casi omnipresente en las películas de Hollywood, mientras que el segundo es una gran estrella en la industria del teatro. Se dice que casi se convierte en el actor principal de 007 y "V de Vendetta". Si lo miras desde la perspectiva de las estrellas de cine que participan en series de televisión, las calificaciones de "Killer Disciple" no fueron calificadas casi desde el principio. Los dramas estadounidenses tienen su propio ritmo de producción y transmisión. Las estaciones de televisión siempre anunciarán la reserva de un lote de dramas nuevos y, al mismo tiempo, "cortarán" un lote de dramas que ya se han transmitido. Por lo tanto, no todos los dramas americanos pueden tener un "final de temporada" perfecto. El pequeño final en el que el guionista expone hábilmente los presagios y revela el suspenso puede convertirse en un "mal final" que nunca se resolverá. Aunque esta medida evita el continuo desperdicio de recursos por parte de los "dramas basura", también decepciona a algunos fanáticos del programa.