La diferencia entre un espíritu loable y un buen espíritu radica en el grado.
Espiritualmente encomiable y espiritualmente encomiable son ambas evaluaciones de una persona o comportamiento, que expresan reconocimiento y aprecio por sus cualidades espirituales. Sin embargo, los dos difieren en grado. Espíritu encomiable enfatiza el gran elogio y afirmación de alguien o de un determinado comportamiento, lo que significa que ha demostrado una cualidad espiritual muy noble y admirable. El espíritu de alabanza es relativamente neutral y expresa reconocimiento de alguien o de un determinado comportamiento, pero el grado no es tan alto como el espíritu de alabanza. Se puede decir que el espíritu de alabanza pone más énfasis en la evaluación positiva y el elogio, mientras que el espíritu de alabanza se inclina más a una especie de afirmación ordinaria.