El misterio es que nadie más puede verlo, porque esta costumbre nos hace sentir como si estuvieramos viendo una "película de terror". Es precisamente por esto que los entierros en el cielo pueden convertirse en nuestros "sacrificios de terror". en China "Una de las razones. Además, los tibetanos creen que los buitres en las montañas alrededor de la plataforma funeraria del cielo no dañan a ningún animal pequeño excepto comer cadáveres humanos, y son "pájaros divinos". La ceremonia del entierro en el cielo generalmente se lleva a cabo temprano en la mañana. Los familiares del difunto envían el cuerpo a la plataforma del entierro en el cielo antes del amanecer.
Generalmente los difuntos son enviados al entierro celeste los lunes, miércoles, viernes y sábados no se permite ir al entierro celeste, lo cual se considera de mucha mala suerte. El horario suele ser entre las 4 y las 4:00. 8 de la mañana antes de que salga el sol. No hay un registro específico y exacto de cuándo comenzó la costumbre del entierro. Actualmente hay varias teorías: una teoría es que el Tíbet está cubierto de tierra helada durante la mayor parte del año, lo que es duro y difícil de excavar y de enterrar en ataúdes debido. a la escasez de árboles se adoptó la forma de entierro celestial según las condiciones locales.
Otra teoría, más creíble, es que el entierro en el cielo es coherente con las enseñanzas budistas. En el budismo, "dar" es el principio que siguen los creyentes. El estado más elevado de dar es sacrificar la vida. Hay una conmovedora historia de "sacrificar la vida para alimentar a un tigre". En cuanto al entierro en el cielo, el budismo tibetano cree que encender humo de morera es pavimentar un camino colorido, invitar respetuosamente a las dakinis a la plataforma de entierro en el cielo, ofrecer el cadáver como ofrenda a los dioses, rezar para expiar los pecados del difunto mientras estaba vivo, y pidiendo a los dioses que se llevaran su alma con él al cielo.
El pueblo tibetano ha prosperado en la meseta Qinghai-Tíbet y ha pasado por una larga historia. Tienen una conciencia materialista simple del universo y del mundo. Los ancestros tibetanos consideraban a los seres humanos como una forma de materia. Para ser precisos, los humanos también eran considerados materia y se les consideraba materia que podía transformarse y evolucionar. Es esta simple conciencia materialista la que ayuda a los tibetanos a comprender y tratar la muerte con calma en lo más profundo de sus almas.