En definitiva, el tratamiento de la fenilcetonuria adopta principalmente una terapia dietética. Cuanto más joven comience el tratamiento, mejores serán los resultados. Una dieta baja en fenilalanina debe basarse en alimentos bajos en proteínas, como almidones, verduras y frutas. Una afirmación extrema pero inexacta es que los tomates son el alimento más adecuado, de ahí el nombre.