La psicología humanista es la tercera fuerza de la psicología. Su núcleo teórico básico es el siguiente:
La psicología humanista, como tercera fuerza de la psicología, es una escuela de psicología que surgió en el Década de 1950. Toma como núcleo la naturaleza humana, el valor humano, la autorrealización humana y el desarrollo del potencial humano, enfatiza la experiencia subjetiva humana y las diferencias individuales y aboga por un método de investigación psicológica centrado en el ser humano.
Naturaleza humana:
La psicología humanista cree que las personas son inherentemente amables, honestas, curiosas y autorrealizadas. Los seres humanos no son sólo seres biológicos, sino también seres espirituales con un valor y una dignidad intrínsecos únicos. Uno de los fundadores de la psicología humanista, Abraham Maslow, propuso la teoría de la autorrealización.
Cree que los seres humanos tienen un impulso interno para perseguir la autorrealización, es decir, convertirse en su verdadero yo y realizar su potencial y crecimiento personal. La autorrealización es un proceso continuo que abarca niveles físicos, psicológicos, sociales y espirituales.
Teoría de la jerarquía de necesidades:
Maslow también cree que las necesidades humanas se dividen en cinco niveles, de menor a mayor: necesidades fisiológicas, necesidades de seguridad y necesidades sociales, necesidades de autoestima y de uno mismo. -Necesidades de actualización. Las personas tendrán diferentes necesidades en diferentes etapas, y estas necesidades se influyen entre sí y aumentan paso a paso.
Libre albedrío:
La psicología humanista enfatiza el libre albedrío de las personas y cree que las personas pueden controlar y cambiar su propio destino en gran medida. Las personas deben asumir la responsabilidad de sus propias vidas y perseguir proactivamente sus propios objetivos y valores.
Diferencias individuales:
La psicología humanista valora las diferencias individuales y cree que cada uno es único. Por lo tanto, en la investigación y la práctica psicológicas, se debe considerar plenamente la singularidad individual y se deben respetar las elecciones y decisiones de todos.
Experiencia subjetiva:
La psicología humanista enfatiza la experiencia subjetiva de las personas y cree que los sentimientos, las experiencias y la conciencia de las personas son la clave para comprender los fenómenos psicológicos. Los investigadores deberían prestar atención al mundo interior de los individuos y escuchar sus voces para poder comprender mejor sus actividades psicológicas.