Mirando el cielo azul, todavía anhelo volar, porque quiero sentir la suavidad de las nubes blancas, el calor del sol y la sensación de libertad desenfrenada, quiero volar rápido. Quiero disfrutar la sensación de tu cabello rozando tus orejas, el viento barriendo tus mejillas y la suavidad de un malvavisco al pisar las nubes blancas, volando cada vez más lejos.