Existen muchos principios para tratar con las personas. Te recomendamos el siguiente:
No hables de lo superficial y lo profundo. No le digas todo a personas que no conoces bien, pero sabe mantener una distancia adecuada.
Dar cara a los demás y respetar a los demás. Si tienes una opinión o un descontento con alguien, puedes regañarlo mentalmente miles de veces, pero cuando lo dices en voz alta, debes saber ser considerado.
Habla sólo al grano, ve hasta el final, pero no hables. Todo el mundo tiene un resultado final que no se puede tocar. A veces, cuando hablamos, debemos tener la mente clara y no hablar con claridad.
No hables de los demás a sus espaldas. Quienes hablan del bien y del mal tienen razón y están equivocados. No hables de los demás a sus espaldas, o podrías tener problemas con tu boca.
Los chistes hay que medirlos. Bromear es originalmente algo feliz, pero si la broma va demasiado lejos, los demás se sentirán infelices o incluso avergonzados.