La economía global ha sufrido grandes pérdidas.
Según la guía, en cualquier momento durante la pandemia global, uno o más estados miembros pueden estar respondiendo a la epidemia en un país, mientras que otros estados miembros pueden no responder a la epidemia en los próximos meses. se verá afectado. Por lo tanto, se alienta a cada Estado miembro a desarrollar su propia evaluación de riesgos para tener en cuenta los resultados de la evaluación de riesgos global y determinar el momento, la escala, el enfoque, la intensidad y la urgencia de la acción a nivel nacional y local. Las acciones nacionales deben separarse de la fase global, y las evaluaciones de riesgos globales no pueden ser representativas de los estados miembros individuales. Al mismo tiempo, la guía insta a los estados miembros a ser internacionalmente responsables bajo el Marco de Preparación para una Influenza Pandémica (PIP) y contribuir al Sistema de Distribución de Beneficios ante una Pandemia (GISRS), incluida la cooperación con instituciones públicas y privadas y organizaciones físicas relevantes.
Los países evalúan la necesidad de asistencia internacional para satisfacer las necesidades humanitarias basándose en evaluaciones de riesgos, recursos y necesidades nacionales y regionales. O considerar proporcionar recursos y asistencia técnica a los países afectados por la gripe. ¿Cómo afecta una pandemia global a la economía mundial? Si un nuevo virus se propaga por todo el mundo, el impacto en la economía mundial también se convertirá en una preocupación importante en todo el mundo. Se mencionó la influenza H1N1, que también se define como un virus de influenza global. Según datos del Banco Central de México, el producto interno bruto (PIB) cayó un 5,3% y las pérdidas económicas alcanzaron decenas de miles de millones de dólares. Según estadísticas de la Brookings Institution, un grupo de expertos estadounidense, el SARS arrasó el mundo. Ese mismo año, el SARS causó aproximadamente 40 mil millones de dólares en pérdidas a la economía mundial.
Por el contrario, el nuevo virus es más astuto y contagioso que el SARS, y tiene una tasa de mortalidad más alta que la influenza, lo que hace que esta epidemia sea más común en todo el mundo. La gravedad de la nueva epidemia, junto con los cambios en el panorama económico mundial, hacen que esta epidemia mundial sea aún más amenazadora. El economista jefe de Moody's ha declarado anteriormente que si el nuevo virus se convierte en una pandemia mundial, puede provocar que las economías de Estados Unidos y del resto del mundo caigan en recesión en la primera mitad de 2020. El 22 de febrero, el Presidente del Fondo Monetario Internacional dijo en la reunión financiera del Grupo de los 20 (G20) que, suponiendo que la economía de China pueda volver a niveles normales en el segundo trimestre, el crecimiento económico mundial este año será 0,1 puntos porcentuales inferior a lo esperado en enero 3,2%. A medida que la nueva epidemia se intensifica en todo el mundo, el Fondo Monetario Internacional puede reevaluar la tasa de crecimiento económico global.