A Yuzuru Hanyu le gusta Pooh porque estaba entrenando en la pista de hielo durante el terremoto en Japón. Un hermano mayor lo sacó y le dio un pañuelo de papel de Pooh para animarlo a convertirse en el Rey de la pista de hielo.
Además, Yuzuru Hanyu dijo que le gusta la sonrisa de Pooh the Bear y la encuentra muy curativa, por lo que siempre trae una caja de pañuelos de Pooh the Pooh como su ángel guardián cuando juega.
Yuzuru Hanyu donará el oso después del juego
Yuzuru Hanyu disfruta del momento en que Pooh cae como lluvia, lo cual es sumamente especial para él. Cuando los lindos Poohs son lanzados de las manos del público a la pista de hielo, es una escena muy espectacular y también es una de las características únicas del patinaje artístico.
Esto sin duda acerca a la audiencia y a los atletas, permitiéndoles comprender mejor los pensamientos de los demás y fortalecerse mutuamente. Después del juego, Hanyu donará a Pooh a instituciones infantiles para llevar alegría y felicidad a los niños.