Acomodarse es preparar una olla de fino pozo de dragón para el alma, nutrirla lentamente para que pueda estar a gusto y a gusto.
Utilizando la técnica retórica de la metáfora, compara calmarse con preparar té para el alma y describe vívidamente la simplicidad del método para calmarse. Al mismo tiempo, muestra la sencillez de asentar el alma.