Ser pisoteado en el estómago por un avestruz adulto con sus garras ya no es una cuestión de si duele o no, sino que pone en peligro la vida.
En la naturaleza, los avestruces atacarán a su propia especie o a sus depredadores. El ataque del avestruz consiste en patear con fuerza, confiando en la fuerte fuerza de sus piernas y en los dedos puntiagudos de sus garras para atacar. La fuerza de patada de un avestruz adulto puede alcanzar los 500 kilogramos. Si patea el estómago con los dedos de los pies, es probable que provoque un "destripamiento".
Hay vídeos en documentales que muestran que los avestruces pueden matar a los guepardos cuando luchan solos.