La razón por la que Kukai regresó a la vida secular fue porque quería promover la cultura y la meditación budistas para que más personas pudieran comprender y estar expuestas al budismo, no solo los monjes en los templos. Él cree que el verdadero valor del budismo radica en su capacidad para ayudar a las personas a deshacerse del dolor y obtener paz interior y felicidad, y este valor no debe limitarse a los templos y los monjes. Después de que Kukai regresó a la vida secular, comenzó a llevar a cabo diversas actividades budistas y conferencias de meditación en la sociedad, promovió activamente la cultura budista y fue profundamente bienvenido y respetado por la mayoría de los creyentes. Aunque su regreso a la vida secular ha sido hasta cierto punto controvertido, también contribuyó positivamente a la difusión y el desarrollo de la cultura budista.