Si lo extrañas, piensa que pasa. La belleza sin intersección es solo un fantasma vacío en el corazón. Olvidar es la mejor manera de extrañarnos. En el camino, las estrellas que encontramos por casualidad nos dan arrepentimiento y calidez. Lo mejor para una persona es estar tranquila, incluso si vive sola, viajando de ciudad tras ciudad, caminando por calle tras calle, mirando al cielo tras otro y siendo testigo de la separación una y otra vez.