Gracia y alimento. La lluvia y el rocío simbolizan el favor y la humedad. Representa una especie de dedicación desinteresada y generosidad. La lluvia y el rocío nutren la tierra y dan vitalidad y vitalidad a la vida, así como la gracia trae esperanza y fuerza a las personas. Por lo tanto, la lluvia y el rocío se utilizan a menudo como metáfora del favor, el cuidado y la ayuda generosa, simbolizando una especie de dedicación desinteresada y generosidad.