Normalmente existe una diferencia entre la hora solar real que muestra el reloj de sol y la hora que muestra el reloj. Esta es la llamada diferencia horaria media. La diferencia máxima en un año puede alcanzar los 15 minutos. La causa de la diferencia horaria media es que la órbita de la Tierra es elíptica y la inclinación entre el eje de rotación y el plano orbital. Por tanto, un buen reloj de sol debe ir acompañado de una tabla comparativa permanente, al menos en unidades mensuales, para corregir la diferencia horaria media. Un enfoque más complicado es convertir la marca de tiempo en una curva, convertir la aguja del dial en un radián o utilizar otros métodos para corregir directamente la diferencia horaria media.