Tan Shanai te despidió y a nosotros nos despidió.
En 1997, cuando Hong Kong regresó a la patria, en la ceremonia de entrega de la defensa chino-británica, el comandante del Ejército Popular de Liberación de China, Tan Shanai, gritó esta sonora orden: "Pueden despedirse, nosotros lo haremos". ¡Asumir el cargo!" A la gente le hirvió la sangre. La voz de Tan Shanai fue fuerte y poderosa, representó la herencia de nuestro país como un gran país, demostró su espíritu como un gran país y dio la bienvenida al regreso de Hong Kong.