El padre de la música rusa es Mikhail Ivanovich Glinka.
Mijaíl Ivánovich Glinka (1804-1857). Compositor ruso, escuela nacional de música. Nacido en Novobaskoy en Smolensk, Rusia, en 1804, nació en una rica familia de terratenientes. Durante su educación general en San Petersburgo, estudió piano con John Field en 1817, además de violín y armonía.
A menudo iba al teatro para disfrutar de famosas óperas de Mozart, Rossini y Cherubini, profesor del Conservatorio Francés de Música. Aprendió violín con Behm y piano con el pianista irlandés Field. El pianista y compositor alemán Meyer fue el principal profesor de teoría musical de Glinka.
Información ampliada:
Evaluación del carácter
Glinka fue el primer compositor que fusionó la cultura musical nacional rusa con la cultura musical occidental y la llevó a un nivel avanzado. Es considerado el "padre de la música clásica rusa". Su música es conocida por su combinación de contenido patriótico y formas nacionales simples, abriendo nuevos caminos para la creación musical rusa en campos importantes como la ópera, la música orquestal y las canciones.
Sus óperas allanaron dos caminos para el desarrollo de la ópera rusa: uno son los temas históricos de patriotismo y heroísmo, representados por "Dedicada al Zar"; el otro son los temas míticos y legendarios, representados por "Ruslan". y Lyudmila". En el campo de la creación musical instrumental, también fue pionero en el camino orquestal de títulos y variaciones de canciones populares.
Sus obras tienen un estilo fresco y están llenas de vida. Sus canciones artísticas se basan en melodías urbanas menores, dándoles un fuerte estilo ruso. Además, también absorbió lenguajes musicales exóticos y multiétnicos para enriquecer las formas musicales rusas, que tuvieron una gran influencia en los futuros compositores rusos.