Si compras billetes para otras personas sin cobrar dinero, no es ilegal.
Si compras un billete para otra persona, no es ilegal que entregues el billete en tu puerta, tomes un autobús o un taxi y le preguntes el precio al comprador.
Si compras entradas para otras personas, cobras gastos de gestión y otros aumentos de precio para venderlas, es con el fin de obtener beneficios, lo cual es ilegal.