Los riesgos empresariales se refieren a los peligros que pueden ocurrir durante el proceso de gestión empresarial. Los riesgos operativos empresariales suelen incluir principalmente los siguientes cinco tipos:
1. Riesgo de políticas: se refiere al impacto de los cambios en las políticas nacionales en las industrias y productos (regulación macroeconómica y orientación de la política industrial)
3. se refiere a Debido a una mala gestión, las empresas pueden tener dificultades en la rotación de capital o incluso declararse en quiebra (estructura de capital, relación activo-pasivo, cuentas por cobrar y por pagar, problemas de flujo de caja, etc.)
4. por firma incorrecta del contrato Tenga cuidado y caiga en una trampa contractual, provocando graves pérdidas económicas a la empresa (incumplimiento de contrato, fraude, infracción de propiedad intelectual)
Riesgo del equipo: se refiere al equipo central. problemas, conflictos de empleados, gestión de pérdidas y conocimientos, etc.
Recomendación: en el proceso de operaciones comerciales, establecer firmemente la conciencia de riesgo y tomar medidas preventivas para prevenir los riesgos comerciales en la mayor medida.
Información ampliada:
El riesgo se manifiesta principalmente en el enorme saldo final de ganancias en el estado de resultados, pero en realidad el monto final en el estado de caja de la empresa es tan pequeño que es casi cero o incluso un número negativo.
Las ganancias en los libros son efectivo. De hecho, esto es un malentendido. Esto se debe a que, aunque las ventas a crédito se incluyen en los ingresos, no se recibe efectivo en el momento de la venta.
Por otro lado, las ventas a crédito aumentan el costo de ventas/inventario pero no desembolsan efectivo de inmediato. Este malentendido a menudo crea una ilusión sobre la posición de efectivo de una empresa, lo que hace que los operadores descuiden la contabilidad equilibrada de la oferta y la demanda de efectivo cuando la empresa se expande o lanza nuevos proyectos.
El efectivo es la sangre de una empresa. Desde la perspectiva de las actividades operativas diarias, una empresa sólo puede funcionar normalmente si se proporciona suficiente efectivo. No disponer de suficiente efectivo traerá graves consecuencias para la empresa, afectando a su rentabilidad y capacidad de pago de su deuda. Como resultado, la calificación crediticia de las empresas en la competencia de mercado disminuye y, eventualmente, la rotación de capital de la empresa se vuelve ineficaz e incluso puede volverse insolvente y declararse en quiebra.
El riesgo de efectivo se manifiesta principalmente en: los propietarios sólo están interesados en los principales indicadores financieros de la empresa, como la relación activo-pasivo, el rendimiento del capital, etc., pero ignoran los problemas ocultos por los indicadores que pagan demasiado; prestar atención al crecimiento de las ganancias y las ventas e ignorar el efectivo disponible; la inversión excesiva en activos fijos reduce la liquidez de la empresa y conduce a la precipitación de capital, la empresa se expande a ciegas y carece de planes correspondientes a corto, mediano y largo plazo;
Referencia: Enciclopedia Baidu - Riesgo empresarial