Ya que eres cruel conmigo, no me culpes por serte infiel.
Análisis de contexto: Poder decir esto demuestra que las dos personas no son extraños, sino personas que siempre han tenido algún tipo de relación y conexión. Además, "yo" es más noble que "tú". Me has atacado muchas veces y no puedo soportarlo más. Por tanto: si eres despiadado, ¡no me culpes por ser injusto!