1. En primer lugar, debes saber que la cola de un gato ayuda principalmente al cuerpo a mantener el equilibrio y expresar emociones.
2. La cola tiene un sistema nervioso desarrollado. Cuando se tira de la cola con fuerza, los nervios que conectan los intestinos y el estómago se dañan fácilmente y el gato es propenso a sufrir molestias gastrointestinales, diarrea y otros síntomas.
3. Los gatos son animales relativamente sensibles. Se asustarán si les arrancan la cola y las reacciones de estrés excesivo también pueden provocar diarrea.
4. En definitiva, la cola del gato es muy sensible, por lo que puedes acariciarla, pero no tirar de ella.