La atractiva madre nacida en la década de 1980 insiste en correr 10 kilómetros por la mañana todos los días. ¿Cómo puede mantener la autodisciplina y dar ejemplo a sus hijos?

La atractiva madre nacida en los años 80 insiste en correr 10 kilómetros cada mañana para cuidar su cuerpo. El cuerpo es externo, y lo más importante es la salud interna. Cuidar su cuerpo, su salud y su forma es lo fundamental. Más importante aún, en el proceso, podrá deshacerse de muchos pequeños problemas y adquirir una actitud más positiva, un estatus laboral más eficiente y una actitud más segura ante la vida.

La autodisciplina y la perseverancia suelen estar relacionadas entre sí. Si sabes gestionar bien tu cuerpo, también podrás gestionar bien tu tiempo. Quienes pueden gestionar su tiempo pueden gestionar su vida y su trabajo. Cuando estás estancado, tu vida diaria suele ser caótica. El ejercicio no sólo aporta buena forma y salud, sino también un buen estilo de vida. Es por eso que muchas personas continúan haciendo ejercicio y manteniéndose en forma durante mucho tiempo. Para los estudiantes con poca capacidad de autocontrol, los padres también deben negociar con sus hijos un método de supervisión mutuamente reconocido y ayudarlos a desarrollar buenos hábitos mediante supervisión, recompensas y castigos. Por ejemplo, verifique periódicamente si se completan los objetivos de la tarea e inste a los niños a completar las tareas objetivo de pasivo a activo. Completar los planes de vacaciones en límites de tiempo no sólo a los niños sino también a los padres. Sólo cuando padres e hijos concertan una cita para enfrentarse y completar juntos este acuerdo de caballeros, los niños podrán desarrollar buenos hábitos de estudio.

Para cultivar la autodisciplina de los niños desde una edad temprana, cada vez más padres se preocupan por si sus hijos podrán tener éxito académico y profesional en el futuro, ignorando el hecho de que se trata de educación para cultivar la autodisciplina de los niños desde una edad temprana. personalidad. Los niños tienen una fuerte autodisciplina no sólo en sus estudios, sino también en los detalles de sus vidas. En términos de detalles, si vemos que los niños pueden lavarse las manos conscientemente antes de las comidas y cumplir conscientemente la disciplina, esto es una manifestación de buena autodisciplina. Los niños con una gran autodisciplina suelen tener buenos hábitos de vida. Los padres deben ser responsables. Este sentido de responsabilidad no se refleja en abofetear a los niños en sus escritorios, mirarlos fijamente y entrenarlos. En cambio, deberían ser indulgentes pero estrictos con sus hijos, dejarles perfeccionar sus planes de vacaciones y animarles a trabajar duro para alcanzar sus objetivos. A ningún niño no le gusta que lo elogien. Cuando el niño progresa, los padres deben alentarlo a tiempo; cuando el niño se relaja, los padres no relajarán el manejo y lo corregirán lo antes posible.