Una carta a casa segura
Queridos mamá y papá:
¿Cómo están? Tu salud es la bendición de mi hija y tu seguridad es el consuelo de mi hija. Escribo esta carta hoy con la esperanza de que puedan cuidarse bien y mantenerse a salvo. Especialmente hoy, cuando los tiempos se están desarrollando rápidamente y la gente en la calle vive a un ritmo de trabajo intenso, espero que continúe disfrutando de su vida tranquila, disminuya la velocidad, se calme y viva felizmente. El requisito previo para la felicidad es la seguridad. .
Cuando era niño, tomaste mi manita y cruzaste la calle, y te tomaste la molestia de recordarme que debía obedecer las reglas de tránsito y tener cuidado con los vehículos en la carretera cuando era imprudente; e imprudente, me enseñaste mucho sentido común en la vida, y cómo aprender a distinguir entre el bien y el mal, juzgar la autenticidad y aprender a protegerte. Los esfuerzos de mis padres influyen en mi camino de crecimiento, porque mis padres se preocupan por el crecimiento de sus hijos. De manera similar, cuando yo sea mayor, ¡la seguridad y la salud de mis padres también son mis deseos y oraciones! Hace mucho tiempo, el lugar de trabajo de mis padres tenía el lema "Ve a trabajar feliz y regresa del trabajo sano y salvo". Me siento muy aliviado al pensar que siempre habéis establecido firmemente la idea de "la seguridad es lo primero". en su mente. Debemos seguir estrictamente los requisitos de varias reglas y regulaciones, no ser descuidados, y mucho menos correr riesgos, y anteponer la seguridad en todo, podremos contribuir más a la empresa y beneficiar a más personas. La seguridad en el trabajo merece atención y la seguridad en la vida merece aún más atención. Presta atención al agua, la electricidad y el gas en casa, y recuerda cerrarlos a tiempo cuando no los uses al salir, asegurarte de que las puertas y ventanas estén cerradas, revisar el agua y la electricidad, etc. Recuerda que el dinero es un dinero; cosas externas, y la salud y la seguridad son más importantes; al encontrar cosas al salir, tome un juicio tranquilo y no sea impaciente, preste atención a la seguridad del tráfico.
El semáforo de seguridad siempre está encendido para nosotros y necesitamos esa luz en nuestro corazón. Pasar un semáforo en rojo puede parecer que ahorra tiempo, pero el peligro está oculto. Muchos accidentes de tráfico se producen por incumplimiento de las normas de circulación. Un conocido hospital ortopédico de Beijing realizó una encuesta a pacientes y descubrió que el 40% de los pacientes resultaron heridos debido a accidentes de tráfico. Así que recuerda, es mejor ir un minuto más lento que tomar un segundo.
Queridos mamá y papá, mi hija espera que siempre recuerden, comiencen desde las cosas pequeñas y formen un hábito, no importa en la vida o el trabajo, recordando a los demás que la seguridad es una responsabilidad y sinceridad. Recuerde que la seguridad es un tipo de cuidado. De esta manera la felicidad de nuestra familia seguirá extendiéndose. La seguridad es como el aire y el agua de los que dependemos para sobrevivir. Aunque son valiosos, las personas siempre se arrepienten cuando los pierden. Por eso te lo recuerdo una y otra vez: cuídalo y presta atención a la seguridad. ¡Las sonrisas de tu familia siempre te acompañan en lo más profundo de tus sueños; que la seguridad nos acompañe a todos y la felicidad siempre te acompañe!