En la Alemania de 1942, Friedrich (Max Riemelt), de 17 años, trabajó duro para entrenarse y soñaba con unirse algún día a un campo de entrenamiento nazi. Después de aprobar numerosos exámenes, se le dio la oportunidad, pero su padre se opuso firmemente, por lo que falsificó la firma de su padre en los documentos, se convirtió con éxito en miembro del campo de entrenamiento y comenzó a entrenar arduamente todos los días. Entre ellos, conoció a Albrecht (Tom Schilling), el hijo de un oficial militar alemán, y los dos entablaron una profunda amistad. Sin embargo, a Albrecht no le gustaban los nazis, sino que prefería la literatura y la escritura. El padre de Albrecht esperaba que su hijo se convirtiera en un oficial nazi como él, y los dos tenían conflictos constantes. En el campo de entrenamiento, Frederick y Albrecht descubrieron muchos fenómenos desagradables y la fe de Frederick comenzó a tambalearse. Pero durante un entrenamiento en el agua, Albrecht nunca volvió a salir del agua...