"Bloody Fairy Tale" describe a un niño introvertido llamado Owen (interpretado por Cody Smith-McPhee) que siempre es intimidado por sus compañeros de clase. Solo se atreve a sostener un cuchillo todo el día y practicar la resistencia y la venganza de la fantasía. frente al espejo hasta que una extraña niña, Abby (Chloë Grace Moretz), se muda al apartamento donde él vive. Tiene poderes mágicos y se convierte en el ángel guardián de Owen, dándole algo en qué confiar en su vida solitaria. Sin embargo, una serie de asesinatos sangrientos también llegaron a este pueblo helado en este momento. Owen descubre que su nuevo amigo es un vampiro, pero el poder de su amistad es mucho mayor que el miedo.