30 grados-40 grados.
Generalmente, no existe un sentido estricto de agua tibia y no existe una definición científica estricta de agua tibia. El agua tibia que todos sienten no tiene necesariamente la misma temperatura. El agua tibia, como se suele decir en la vida, se juzga por el tacto, ni fría ni caliente. Es apropiado beber agua tibia a unos 40 grados centígrados. Beber agua tibia no es perjudicial para el organismo, ayuda a nuestra peristalsis intestinal y además es mejor para el organismo. No irritará nuestro estómago por sobrecalentamiento o exceso de frío.